El alojamiento tenía carencias de mantenimiento. El primer día, durante una tormenta se filtró agua

El alojamiento tenía carencias de mantenimiento. El primer día, durante una tormenta se filtró agua por varias ventanas que estaban desajustadas. Además de filtrarse agua desde el exterior por la unión entre pared y suelo. Esto impidió que pudiéramos terminar de instalarnos por temor a que se nos mojara la ropa y calzado. Al día siguiente reclamamos en recepción que nos cambiarán de alojamiento, pero nos fue negada la petición. Enviaron a un operario de mantenimiento que poco pudo hacer. Afortunadamente, no hubo más tormentas como la que provocó la inundación, pero en el alojamiento quedó bastante humedad y mal olor. Por el aspecto del mobiliario se apreciaba que no era la primera vez que esto ocurría.