Triste despedida

Siempre he disfrutado de unas estancias agradables y reponedoras en Le Col Vert pero este año, al llegar al camping ya estaba la nevera en la parcela y nadie me dio instrucciones. Para mi sorpresa, la nevera estaba sucia (parecía haber sido cogida de otra parcela y, sin limpiarla a fondo, me la llevaron). Le pregunté a los vecinos de parcela y me dijeron que la había llevado un rato antes allí el personal del camping? Otro inconveniente fue que, durante dos noches, tuvimos el concierto de 3 parejas de franceses, de entre 50 y 60 años, que se emborrachaban en la zona de barbacoa (pegada a mi parcela) y entonaban canciones típicas francesas durante dos largas horas. Por otra parte, el día de salida y recogiendo entre chubascos torrenciales, recibí una llamada de recepción recordándome la hora de salida y apostillando que, de pasarme en tiempo, tendría que abonar otro día más (la parcela quedaba vacía y no esperaba nadie a entrar en ella). También ese día vino a recoger la nevera un empleado del camping. Fue tres veces, la primera y segunda le pedimos que volviera en un rato, pero a la tercera, nos pidió que vaciásemos la nevera, lo cual hicimos con prisas dado que el chico estaba allí, esperando, y no nos dio tiempo a pasarle un trapo y sanitol (como tuve que hacer yo el primer día), pues al vaciar la nevera y dar la espalda para meter en una bolsa los alimentos, la nevera ya estaba en el carrito? Todo esto podría haber pasado por normal si hubiese quedado ahí. El problema es que al día siguiente, y ya en mi casa recibí un correo de una tal Marie, escribiéndome en nombre del camping o incluso de Sandaya, reprochándome en un tono desafiante y poco respetuoso el estado de la nevera (insisto en que no tuvimos oportunidad de limpiarla como hacemos siempre), y condenándome por escrito y de por vida a no poder alquilar más neveras en cualquier camping SANDAYA. Ante mi sorpresa, decido responder al correo disculpándome y exponiendo mi trayectoria en el camping (6 o 7 años yendo todos los veranos), además de solicitando que se retire dicho castigo o se me exponga la cláusula que dice que debo ser yo quien higienice o desinfecte la nevera? De esto hace una semana y aún no tengo noticias de Marie? Nos deja una sensación muy triste que después de tantos años disfrutando cívicamente de las instalaciones del camping se nos haya puesto en una lista de ?no deseables? que ni siquiera éramos conscientes de que podría llegar a existir. De no recibir noticias del camping en unos días para que podamos hablar de lo sucedido, tristemente diremos adiós a Le Col Vert y a cualquier otra instalación de Sandaya puesto que entendemos que no somos bien recibidos.